Dirigió su mirada hacia la luna, y de sus ojos, grises, se
escapó una lágrima inocente. No se inmutó en secársela, como habría hecho de
haber habido alguien en la misma habitación, simplemente dejó que fluyera por
su rostro, sintiendo ese cosquilleo que le recordaba que no era feliz.
Me gusta mucho como escribes :) Follow.
ResponderEliminarNos comentamos, saludos <3.
Me encanta!!!!
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